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En un tratamiento de fertilidad, diversas variables determinan el éxito del embarazo y el nacimiento de un bebé. Reducir el tiempo necesario para lograr la gestación y la carga emocional que ello conlleva es crucial. La preparación de la futura mamá es tan fundamental como la selección del embrión adecuado. Aquí es donde la inteligencia artificial (IA) marca una revolución.
Del ojo del embriólogo al ojo de Chloe™
Hasta ahora, los embriólogos han sido responsables de elegir el embrión basándose en parámetros como su forma, velocidad de división, fragmentación celular, simetría y estructura del blastocisto. Hoy, la IA complementa perfectamente este trabajo, permitiendo elegir al mejor embrión en menos tiempo y con mayor precisión gracias al análisis detallado de las imágenes embrionarias.
Tambre aportó las primeras imágenes
Tambre en Madrid fue la primera clínica que implementó esta tecnología de forma experimental, que incorporó esta tecnología de IA en su laboratorio de fecundación in vitro (FIV); aportó las primeras imágenes al programa en sus inicios, y actualmente esta IA ya forma parte de su día a día.
Estas soluciones tratan de dar respuesta a la creciente tasa de infertilidad y al cada vez más acusado retraso de la maternidad. Implementa la avanzada tecnología basada en IA diseñada para revolucionar la selección de embriones durante los procedimientos de fecundación in vitro, al usar miles de imágenes del desarrollo embrionario para seleccionar al que será el más adecuado para implantar en el útero materno.
“Chloe™ promete mejorar significativamente las oportunidades de éxito para las parejas que enfrentan dificultades para concebir. Esta herramienta no solo aumenta las probabilidades de embarazo, sino que también reduce el tiempo y el desafío personal que suponen los tratamientos de fertilidad”, destaca la directora científica de Tambre, la doctora Ángela Llaneza.
Una embrióloga observa el desarrollo de los embriones en una de las incubadoras Geri Time Lapse en Tambre.
Aumento de la infertilidad
Actualmente, la infertilidad afecta entre el 15-20% de las parejas en edad reproductiva en España, según la Sociedad Española de Fertilidad (SEF). Además, el retraso en la maternidad se ha convertido en una tendencia creciente, las españolas tienen su primer hijo de media pasados los 32 años. En este contexto, la incorporación de las herramientas de IA ofrece una nueva esperanza a quienes buscan formar una familia.
“Chloe™ representa un hito significativo en la búsqueda de métodos más precisos y efectivos para mejorar las tasas de éxito en tratamientos de fertilidad. Utilizando algoritmos avanzados de IA, esta tecnología analiza minuciosamente imágenes de embriones y evalúa múltiples criterios para identificar aquellos con mayor potencial de implantación exitosa”, explica la directora de Laboratorios, la doctora Susana Cortés.
Este proceso no solo optimiza la selección de embriones, sino que también reduce el tiempo necesario para tomar decisiones críticas, brindando a los pacientes una mayor confianza y tranquilidad en cada etapa del tratamiento.
La embrióloga Carolina Cordero en el laboratorio FIV donde ya se está utilizando Chloe.
Tecnología avanzada
La embrióloga explica que todos los incubadores de la clínica están sincronizados con Chloe™, que monitoriza todas las divisiones del embrión, permitiendo conocerlas al detalle. Basándose en ellas y en los tiempos en que se desarrollan, se valora cuál es el embrión con mayor capacidad de implantación en el útero materno.
“Esta IA nos da un score de tasa de implantación de cada embrión. El sistema se alimenta con millones de imágenes”, explica la especialista, añadiendo que “analiza automáticamente todos los parámetros, algunos de ellos que el embriólogo no puede ver, por eso es de mucha ayuda”.
Llegar antes al embarazo
Esta herramienta permite al embriólogo “elegir el orden de transferencia de los embriones para ser más efectivos y lograr el embarazo en el menor tiempo posible, reduciendo el número de tratamientos a los que se debe someter una mujer para lograr el embarazo, y nunca con la intención de descartar embriones”.
“Hemos sido pioneros en el uso de la IA en reproducción asistida al ser la primera clínica de España en utilizar la tecnología Chloe™ en su fase de pruebas. Ahora hemos implementado esta tecnología de forma habitual en los tratamientos de reproducción asistida, lo que es un adelanto extraordinario para nuestros pacientes”, añade Cortés. Una tecnología que representa un avance significativo en la capacidad para ofrecer soluciones personalizadas y efectivas a los pacientes que se enfrentan al desafío de la infertilidad.
