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Los fallos de implantación del embrión y los abortos de repetición son situaciones que suponen un desafío, tanto para las mujeres y parejas que anhelan formar una familia como para los expertos en fertilidad.
Que el embrión no llegue a implantar en el útero materno puede deberse a una variedad de factores que implican tanto a la mujer, como al varón y al propio embrión. Para encontrar las causas de los fallos de implantación y los abortos recurrentes, en Tambre realizamos un completo estudio con un enfoque multidisciplinar en el que participan médicos especializados en fertilidad, embriólogos, genetistas e inmunólogos que con su conocimiento y el uso de la última tecnología disponible, nos permiten buscar qué puede estar originando estos fallos de implantación o los abortos recurrentes, las causas que los originan, para poder ofrecer un diagnóstico preciso, esencial para pautar el tratamiento más favorable a cada paciente.
Qué son los fallos de implantación
Los fallos de implantación y abortos de repetición no son lo mismo, aunque en ambos casos no se produce la consecución de un embarazo.
Por un lado, consideramos que hay un fallo de implantación cuando en un tratamiento de Fecundación in Vitro (FIV) el embrión de buena calidad que se transfiere a la madre no logra implantar y no se logra la gestación. Según las recomendaciones de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), si después de 3 transferencias de embriones de buena calidad no se consigue el embarazo, entonces es necesario estudiar las causas de esos fallos de implantación.
La incidencia es de un 10%, que se reduce al 5% cuando descartamos el factor uterino como causa.
En el caso de los abortos de repetición, se consideran como tal cuando el embrión sí logra implantar y ha dado lugar a la gestación, pero la mujer sufre la pérdida espontánea antes de la semana 20 de gestación. Cuando esta situación sucede en dos o más embarazos se consideran abortos recurrentes y, por tanto, requieren de un estudio para conocer sus causas.
Causas de los fallos de implantación
Las causas que provocan los fallos de implantación son diversas:
- Problemas en la cavidad uterina
El endometrio debe estar en un estado óptimo para que la implantación sea exitosa. Y circunstancias como que el endometrio esté demasiado fino o grueso, o si hay problemas de receptividad endometrial pueden impedir la implantación. En Tambre la personalización es una de nuestras señas de identidad. Para las pacientes que sufren de fallos de implantación sin causa aparente, disponemos de test de receptividad endometrial que nos aportan una valiosa información para organizar la transferencia de forma personalizada:
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- Test ES-TIME: El test ES-TIME descubre si la ventana de implantación, el momento clave para lograr la nidación, se encuentra desplazada, algo que le ocurre en torno al 30% de las pacientes, lo que nos permite llevar a cabo una transferencia embrionaria personalizada.
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- Test ES-META: A la vez, podemos descubrir si detrás de los fracasos de implantación hay agentes patógenos que están provocando que el embrión no implante, lo que es posible hacer a través del test ES-META con un estudio de posibles microorganismos que estén causando endometritis (principalmente bacterias) así como estudio del microbioma del endometrio (Microbiome Endometrial Typing Analysis).
- Factores inmunológicos
Algunos trastornos del sistema inmunitario pueden hacer que el cuerpo reconozca al embrión como un invasor y lo rechace antes de la implantación. En Tambre hemos sido pioneros en España al ser la primera clínica de Reproducción Asistida en introducir una Unidad de Inmunología Reproductiva para investigar y comprender las causas del fallo de implantación, con el objetivo de ofrecer distintas opciones de tratamiento a los pacientes.
En ella estudiamos si las causas de que no se produzca el embarazo, bien por fallos de implantación o de que la paciente sufra abortos recurrentes, tienen un origen inmune. Para lo cual se realiza un perfil completo de los factores inmunológicos implicados en estas situaciones.
- Desequilibrios hormonales
Las fluctuaciones hormonales, como los niveles bajos de progesterona previos a la transferencia pueden afectar al endometrio y, por lo tanto, dificultar la implantación.
- Problemas genéticos en el embrión
A pesar de ser de buena calidad, algunos embriones pueden tener anomalías cromosómicas que afectan su viabilidad y capacidad de implantación.
- Anomalías uterinas
En ocasiones, alteraciones en la morfología del útero (útero unicorne, utero en T…), presencia de pólipos o miomas o adenomiosis (tejido endometrial que se desarrolla en la pared muscular del útero) pueden dificultar la implantación del embrión.
- Problemas de coagulación sanguínea
Las trombofilias pueden estar implicadas en los fallos de implantación y los abortos de repetición. Trastornos de la coagulación como el síndrome antifosfolípido pueden aumentar el riesgo de coágulos sanguíneos en el útero, lo cual dificulta la implantación.
- Infecciones uterinas
Infecciones o inflamaciones en el útero pueden interferir con la capacidad del embrión para implantarse de manera adecuada.
El diagnóstico, lo primero y más importante
Existen diferentes causas que pueden explicar por qué suceden fallos de implantación en tratamientos FIV con embriones de buena calidad. Es por eso que, para tratar de reducir los fallos de implantación, así como de los abortos de repetición, lo primero que debemos hacer es realizar un estudio completo.
Para ofrecer un diagnóstico, en Tambre realizamos una evaluación completa que puede incluir pruebas como análisis hormonales, pruebas genéticas (para detectar alguna posible alteración cromosómica del embrión), estudio anatómico del útero y el endometrio (mediante una histerosalpingografía, una histeroscopia o una resonancia magnética).
Estudio del factor masculino (seminograma, estudio del cariotipo, etc.). En Tambre vamos más allá con el estudio de la fragmentación de los espermatozoides (COMET) para ver la cadena del ADN y valorar si es necesario mejorar la calidad del semen, así como si es necesario utilizar técnicas específicas de selección espermática como el CHIP Fertile (para excluir los espermatozoides fragmentados, mejorar la fecundación y la llegada de los embriones a blastocisto).
En casos muy específicos, también haremos estudios genéticos en el semen (FISH en espermatozoides), donde se analiza los cromosomas en los espermatozoides. Esto podría estar relacionado con fallos en los tratamientos de reproducción asistida, ofreciendo información sobre su contenido genético.
Estudio endocrinológico (diabetes, hipertensión, hipercolesterolemia, problemas de tiroides, etc.) y el estudio inmunitario (para detectar, por ejemplo, si el organismo de la madre rechaza al embrión). Las incompatibilidades inmunológicas pueden estar detrás de los fallos de implantación y de abortos de repetición. Una de las técnicas recomendadas es el estudio de compatibilidad entre los receptores uterinos KIR (se realiza en la futura embarazada) (killer inmonoglobulin-like receptors) y las moléculas HLA-C que va a presentar el embrión . Con un simple análisis de sangre de la futura madre y de la pareja o el donante se puede conocer si existe una incompatibilidad inmunológica.
Expertos en casos difíciles
En Tambre somos expertos en casos complejos, estudiamos los fracasos sucedidos en anteriores transferencias FIV en otras clínicas. La finalidad de todo ello es dar con el diagnóstico y evitar que se vuelvan a realizar acciones que, en anteriores ocasiones, no han resultado exitosas.
Cómo reducir los fallos de implantación
Una vez que hemos identificado la causa de los fallos de implantación, en Tambre vamos a desarrollar el tratamiento y estrategia que nos permiten abordar el problema de forma personalizada y aumentar las posibilidades de una implantación exitosa a través de:
- Análisis del embrión
Mediante el Diagnóstico Genético Preimplantacional (DGP) se pueden seleccionar embriones libres de alteraciones cromosómicas y/o genéticas antes de la transferencia al útero materno, aumentando así las posibilidades de una implantación exitosa.
- Transferencias de blastocistos
Para conocer cómo está siendo la evolución de un embrión y poder así seleccionar los mejores y con mayor capacidad de implantación, conviene realizar la transferencia cuando han alcanzado la etapa de blastocisto, es decir, entorno al 5/6 día de desarrollo tras la fecundación.
- Transferencia en diferido
Otra opción que puede resultar favorable consiste en no transferir los embriones en fresco, sino congelarlos para hacerlo más adelante, en otro ciclo. De este modo, podemos realizar una preparación endometrial con ayuda farmacológica o bien de forma natural para que el endometrio esté en óptimas condiciones y sea más receptivo que en el mismo ciclo en el que hemos desarrollado la estimulación ovárica.
- Fármacos
Si detectamos problemas de colesterol, diabetes, tiroides, así como de coagulación o rechazo inmunológico, disponemos de diferentes fármacos que nos ayudarán a evitar los fallos de implantación.
- Cirugía
Ante determinados problemas diagnosticados, como pólipos o miomas endometriales podemos realizar una histeroscopia para corregirlo. Del mismo modo, si se identifican anomalías uterinas, como útero septado o bicorne, la cirugía podría corregirlas y crear un ambiente más propicio para la implantación.
¿Necesitas un diagnóstico personalizado?
Si has sufrido fallos de implantación o abortos de repetición y quieres que descubramos dónde puede estar el origen o necesitas una segunda opinión, déjanos ayudarte. Nuestro equipo especializado en casos complejos se encargará de estudiar y valorar cada uno de tus síntomas y circunstancias concretas. El mismo equipo médico diseñará tu tratamiento personalizado y realizará el seguimiento de tu caso.
Y para que durante el proceso te sientas completamente arropada, contarás con una persona asesora de la Unidad de Orientación Especializada de Tambre que te acompañará y resolverá tus dudas.
Si tienes alguna consulta que hacernos sobre los fallos de implantación o quieres más información sobre los tratamientos que desarrollamos en Tambre, contacta con nosotros y pide tu primera cita en el 91 411 61 11. Los fallos de implantación y los abortos de repetición no tienen por qué suponer el fin de la búsqueda de tu bebé. Date una nueva oportunidad para superar estas dificultades.