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La hipertensión durante el embarazo (preeclampsia – eclampsia) puede poner en riesgo la salud de la madre y el feto, de ahí la necesidad de un buen control médico para controlar las condiciones del embarazo.
Debemos controlar la hipertensión durante el embarazo porque el embarazo por sí mismo puede agravar patologías hipertensivas ya existentes, es el caso de la hipertensión arterial crónica o inducirlas como en el caso de la hipertensión gestacional o de la preeclampsia.
¿Qué es la hipertensión gestacional?
Es la Hipertensión inducida por el embarazo, aparece una tensión arterial superior o igual a 140/90 mmHg después de la semana 20 de gestación cuando no existía ningún diagnóstico previo de hipertensión.
La preeclampsia, ¿en qué consiste?
La preeclampsia es un trastorno hipertensivo en el que también aparece un elevado nivel de proteínas en orina, lo que llamamos proteinuria. La preeclampsia se puede clasificar en leve, moderada o severa en función del valor de la tensión y la cantidad de proteínas en orina.
¿Cuales son los síntomas de una preeclampsia
Pueden aparecer dolores de cabeza secundarios al aumento de la tensión arterial. También habrá problemas para mantener el equilibrio hídrico, el manejo de líquidos por parte de nuestro organismo, esto conlleva la retención de líquidos, aparición de edemas y un aumento repentino del peso. Se orina menos líquido del que se ingiere (oliguria), esta situación puede llevarnos al compromiso renal.
¿Se trata de un trastorno grave?
La preeclampsia es una patología grave que pone en riesgo la vida de la madre, en casos severos la preeclampsia precede a la eclampsia, que cursa con tensiones arteriales muy altas y de difícil control farmacológico, intensa proteinuria, edema generalizado (anasarca) y convulsiones.
En estos casos se puede llegar incluso a producir un síndrome característico conocido como síndrome de Hellp, que conlleva la destrucción de glóbulos rojos (hemólisis) con bajo recuento de plaquetas (plaquetopenia), fallo hepático con transaminasas elevadas, coagulopatía…
Los trastornos hipertensivos ligados al embarazo, ¿tienen tratamiento?
El origen de estos trastornos es el propio embarazo, así que el parto es el tratamiento definitivo.
Su médico valorará la situación en función del estado de la madre y el riesgo para su salud y la edad gestacional que garantice la viabilidad del recién nacido. Es decir, se tratará de reducir la morbimorbilidad de la madre y el hijo valorando cada caso de forma individual.