Índice de contenido
El año 2024 que se acaba ha sido emocionante y lleno de historias inspiradoras. En Tambre, donde ponemos nombre a los sueños, queremos contarte esas historias de sueños que en 2024 nos han motivado. Un año más, agradecemos la confianza de cada una de las mujeres y las parejas que han confiado en el equipo Tambre.
Con más de 45 años de experiencia en el tratamiento de la infertilidad y especializados en casos complejos, Clínica Tambre ha sido testigo de innumerables historias de valentía y esperanza que la ciencia ha ayudado a cumplir. A lo largo de los años, hemos acompañado a parejas y mujeres solteras de todo el mundo en su camino hacia la maternidad y la paternidad, gracias a la reproducción asistida, siempre con una sensibilidad humana única que nos permite conocer sus emociones, sus luchas y, en muchos casos, su mayor alegría: el nacimiento de un hijo.
Para cerrar este año con esperanza, compartimos algunas de estas historias conmovedoras. Porque estamos convencidos de que te pueden inspirar.
Victoria y Evie
Una de nuestras primeras Embajadoras del 2024 fue Victoria, una londinense de 41 años que logró cumplir su sueño de ser madre después de varios tratamientos sin éxito en Reino Unido. Ella se embarcó en un viaje emocional con el apoyo de la clínica, donde encontró no solo tratamientos de alta calidad, sino también el respaldo emocional necesario. Tras dos intentos frustrados de FIV en Londres, viajó a España y encontró en Tambre una clínica llena de empatía, magníficos profesionales y un profundo respeto que le permitieron cumplir su sueño: ser madre de Evie.
Los desafíos de Nicola
Desde un principio, nuestra paciente más viajera, Nicola, se encontró con muchos desafíos en su camino hacia la maternidad. Durante diez años trató infructuosamente de ser madre. Con la ayuda del equipo de Tambre y un tratamiento de fecundación in vitro (FIV) personalizado, a los 48 años logró finalmente alcanzar su objetivo, y ¡en el primer intento! Su historia es un testimonio del poder de la perseverancia. De su experiencia, destaca la comunicación constante con el equipo. «A veces te sientes una estadística en un viaje tan largo, pero a mí no me hicieron sentirlo en ningún momento. Fue todo precioso”. Un proceso que además, se complicaba porque durante gran parte de su tratamiento Nicola residía en Oriente Medio, pero la distancia no fue un obstáculo en ningún momento.
De París a Madrid: Aurélie y Benjamin
Aurélie y Benjamin viajaron desde París con la esperanza de tener un bebé en común. Por su edad, 43 años, Aurélie ya no tenía opciones en Francia y conocieron Tambre donde “fueron claros y realistas». Y lo que podía haber sido un obstáculo no lo fue: «el idioma no fue ninguna barrera porque tanto la doctora como la coordinadora eran bilingües”, destacaba Aurélie. La pareja agradeció el enfoque humano y profesional que encontraron en el equipo Tambre.
Marta, Carlos y el sonido que cambió sus vidas
Una historia especialmente conmovedora es la de Marta y Carlos. Ellos estuvieron a punto de tirar la toalla después de someterse a tratamientos infructuosos. En Tambre encontraron lo que deseaban. La pareja destaca el pequeño gesto que cambió sus vidas. Tener toda la información y poder hablar con los profesionales durante su tratamiento fue para ellos vital y tranquilizador: “Nos dio mucha tranquilidad poder resolver cualquier duda que tuviéramos durante el proceso, o poder hacer preguntas que en el momento de la consulta no te venían a la cabeza o se quedaban en el tintero. Ha sido muy fácil de resolver dudas con el simple hecho de llamar”. Su sueño cumplido se llama Mateo: “Escuchar el pum pum pum pum del corazón en la primera ecografía te cambia la vida para siempre”, nos contaron.
Encuentro de Pacientes: Sueños Cumplidos
Este 2024 hemos estrenado con mucha alegría los Encuentro de Pacientes Tambre: sueños cumplidos. Tuvimos la suerte de contar Almudena y su bebé Vega, que nos contó qué le motivó a tomar esa importante decisión. También nos encantó saber por qué confiaron en el equipo Tambre Hernán y Raquel, que hoy son los orgullosos papás de Enzo.
Almudena y Vega, un amor incondicional
Una historia de amor y valentía es la de Almudena, madre soltera por decisión. Ella es hoy la orgullosa mamá de Vega gracias a un tratamiento de fecundación in vitro (FIV). “Siempre tuve claro que quería ser madre, y llegó un momento en el que biológicamente tenía que ser ya y decidí dar el paso y ser mamá en solitario”. Se informó bien y se asoció a Madres Solteras por Elección. Gracias a las buenas experiencias de asociadas se animó a visitar la clínica y ya tuvo claro que iba a ser en Tambre donde haría su tratamiento. “No se necesitan más amores para encontrar al verdadero amor”, afirmaba.
Virginia y Melinda, mamás de Sofia
Desde Francia viajaron Virginia y Melinda con el deseo de ser madres juntas. Un viaje emocionante para ser madres a través de la doble donación de óvulos. “Pensamos, ¿por qué no una doble donación? Nos lo sugirió la clínica y nos lanzamos. No conocíamos esa opción y nos pareció una bella posibilidad para ser mamás y aquí está Sofia». Su historia muestra cómo el amor y el deseo de ser padres puede superar cualquier barrera. “Sabíamos que en España el proceso es mucho más rápido que en Francia”, nos contaban.
Natacha, madre de dos niñas por ovodonación
También desde Francia y en busca de una clínica especializada en casos difíciles llegó Natacha. Su caso era especialmente difícil, tras dos embarazos ectópicos perdió ambas trompas de Falopio y su reserva ovárica estaba agotada. “Mi tratamiento de donación de óvulos suponía renunciar a tener hijos con mi genética, pero el amor es mucho más fuerte que todo”, cuenta. Tuvo a su primera hija y dos años después repetía su experiencia: “Hoy somos los orgullosos padres de dos maravillosas niñas con Clínica Tambre gracias a la donación de ovocitos”.
Jennifer Frahm, desde EEUU en busca de un sueño
Ampliar la familia siempre fue el objetivo de Jennifer y su marido. Después de intentar un segundo embarazo cuando su primer hijo tenía 2 años, descubrieron que tenían problemas de fertilidad. Tras un fallido tratamiento de fecundación in vitro (FIV) en una clínica norteamericana en 2019, decidieron buscar alternativas. Jennifer cruzó un continente en busca de su sueño y encontraron en clínica Tambre la experiencia y los medios que necesitaban para lograr su embarazo. «Al llegar a Tambre, noté de inmediato que todo el equipo trabajaba unido y se comunicaba muy bien, y sé por experiencia que cuando las personas colaboran y se comunican de esa manera, realmente, eso hace una gran diferencia».
Monika, Luigi y la luz de sus vidas: Soleil
Monika, de 48 años y origen polaco, y Luigi, italiano de 50 años, acumulaban 14 años de esterilidad y varios tratamientos fallidos en distintos países. «Habíamos pasado por una FIV en Italia, tres ovodonaciones también en Italia y otra en Grecia, pero ninguna funcionó», cuenta. Además, Monika tenía complicaciones médicas que dificultaban aún más su proceso. Decidieron confiar en Tambre, donde encontraron la calidez y profesionalidad que no habían experimentado antes. “Fue leer las opiniones de otros pacientes lo que nos dio la confianza para elegir Tambre. Nos transmitieron una calidez y profesionalidad que no habíamos encontrado antes”. Su historia de esperanza y amor culminó con la llegada de su bebé Soleil.
Segundo Encuentro de Pacientes: la emoción de crear una familia
El segundo encuentro de pacientes de Clínica Tambre nos mostró nuevas historias de superación y amor incondicional. Lorena es la orgullosa mamá de Eidan y nos cuenta que: “Lo tenía claro desde los 30 años. Quería ser madre, y aunque la vida me llevó a serlo sola, sabía que no estaba sola en este proceso. Me hablaron muy bien de Tambre, y no lo dudé”. Por su parte, Begoña y Bruno tuvieron varios intentos fallidos. Y en Tambre lograron su sueño a la primera. Lograron el embarazo y 2 años después volvieron a Tambre y hoy son los orgullosos papás de Sergio y Manuel.
Historias por escribir
Estas historias son solo algunas de las muchas que se viven en Clínica Tambre, donde la esperanza se convierte en realidad a través de un enfoque integral, emocional y humano. Acabamos 2024 con una sonrisa. Si estás considerando iniciar un tratamiento de fertilidad tu historia está por escribirse. Si ya estás o estáis inmersos en él, estas experiencias son prueba de que, con el apoyo adecuado, los sueños pueden cumplirse.