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¿Conoces las diferencias entre los Ovarios Poliquísticos y el Síndrome del Ovario Poliquístico?

Seguro que no es la primera vez que has oído hablar de estos términos. Pero debido a la semejanza del nombre, a menudo, tendemos a confundir en qué se diferencian los Ovarios Poliquísticos (OP) y el Síndrome del Ovario Poliquístico (SOP). Mientras que en el primer caso podemos entender que es un proceso bastante habitual, el otro hace referencia a una patología de mayor gravedad. A continuación, resolvemos para las lectoras del blog de Tambre todas las dudas para conocer en qué se diferencia, sus síntomas y los posibles tratamientos. Para esto, le hemos preguntado a nuestra especialista en fertilidad, la Dra. Elena Santiago sobre ambas patologías. ¡Sigue leyendo!.

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¿Qué son los Ovarios Poliquísticos?

Es frecuente que las mujeres jóvenes presenten ovarios poliquísticos. Este concepto hace referencia a aquellos ovarios que tienen múltiples folículos antrales, o, mejor llamados, “ovarios multifoliculares”. En estos casos, los ovarios guardan una gran reserva ovárica sin mayores consecuencias, aunque otros casos pueden estar relacionados con trastornos hormonales.

El ovario poliquístico puede ser asintomático o, por el contrario, relacionarse en algunos casos con ciclos anovulatorios, pudiendo presentarse además reglas irregulares o incluso amenorrea que produzcan infertilidad igual que en el SOPNormalmente está muy relacionado con una buena reserva ovárica, y aunque igualmente puede aparecer en mujeres fértiles de todas las edades, es más frecuente en mujeres más jóvenes hasta los 30-35 años.

Tener ovarios poliquísticos no es algo grave, aunque es recomendable en cualquier caso el seguimiento por parte de un especialista. El ovario poliquístico en sí no requiere tratamiento, al menos que existan ciclos irregulares o amenorrea asociados. En tal caso, sería el mismo que para el SOP para regular los ciclos o para la infertilidad asociada.

¿Qué es el Síndrome del Ovario Poliquístico (SOP)? Diagnóstico y tratamiento

Mientras que la anterior es algo más común, el Síndrome de Ovarios Poliquísticos es una afección de un conjunto de signos y síntomas que afecta a un 8% de las mujeres.

El SOP ocurre o bien por una anovulación que producirá ciclos irregulares o incluso ausencia de reglas, o bien por un aumento en la secreción de hormonas masculinas, o ambas al mismo tiempo. Entre otras cosas, las mujeres que lo sufran pueden además presentar obesidad, resistencia a la insulina, acné, exceso de vello (hirsutismo) e infertilidad. Este síndrome puede darse a lo largo de toda la vida fértil, pero es más común en mujeres jóvenes.

El SOP puede tratarse de diferentes formas según lo signos o síntomas que se presenten, algunos de los más comunes:

Los ciclos irregulares o la amenorrea se pueden regular con la píldora anticonceptiva o con otros tratamientos hormonales.

La obesidad se debe tratar con dieta y ejercicio.

 

Las manifestaciones clínicas secundarias al hirsutismo se pueden tratar con medicamentos para mejorar el hirsutismo, acné y alopecia. Si estos no mejoran con la píldora anticonceptiva, se puede apostar por una píldora antiandrogénica.

 

En el caso de que exista infertilidad asociada, se valorará cada caso y se implementarán tratamientos de inducción de la ovulación, inseminación artificial o fecundación in vitro.

Ovarios poliquísticos, Síndrome del Ovario Poliquístico y embarazo

Como hemos visto anteriormente, ambos pueden estar asociados a ciclos anovulatorios. Si no hay ovulación, no hay posibilidad de embarazo de forma natural, pero muchas veces los ciclos anovulatorios pueden ser esporádicos y no suponen un problema de infertilidad para muchas de estas mujeres.

Sin embargo, en aquellas que prácticamente no haya ovulaciones, habrá que recurrir a la reproducción asistida para conseguir un embarazo. Una vez embarazada, lo único a tener en cuenta en el SOP es tener bien controlado los niveles de glucosa en sangre en aquellas mujeres con resistencia a la insulina asociada. Por lo demás, el seguimiento será exactamente igual que para el resto de embarazadas

Ovarios poliquisticos, Síndrome del Ovario Poliquístico y menopausia

A pesar de que el Síndrome del Ovario Poliquístico es más frecuente en mujeres jóvenes de entre 20 y 30 años, también puede afectar a aquellas que se encuentran en periodo de menopausia.

En esta etapa aumenta el riesgo de presentar problemas cardiovasculares, y un 40% de las mujeres mayores de 40 años que tienen este trastorno (SOP), padecen un síndrome metabólico relacionado con la hipertensión, niveles altos de colesterol y un índice de masa corporal elevado; factores que son de riesgo para el corazón.

Conclusiones

En definitiva, si se presenta alguno de los síntomas mencionados anteriormente, es importante acudir al médico a la mayor brevedad posible. Además que en estos casos, es obligada la visita al ginecólogo mínimo una vez cada dos años. A pesar de que lo más frecuente son los casos de ovarios poliquísticos, no podemos olvidar que existen otras patologías más graves como el SOP, que cuanto antes se traten mucho mejor. Por ello, con la ayuda de profesionales, es posible tener una solución al problema, mejorando la salud y calidad de vida de las mujeres que lo padecen.

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– Una ecografía vaginal para conocer el estado morfológico y funcional del útero, trompas y ovarios.
– Un análisis de sangre para conocer la actividad ovárica: hormona antimülleriana (AMH).
– Y si fuera necesario, seminograma para conocer la calidad del semen.

En la segunda entrevista con tu ginecóloga te comentará los resultados de tus pruebas, te explicará el diagnóstico y se pautará el comienzo del tratamiento o, en su defecto, se prescribirán otras pruebas complementarias necesarias para confirmar el diagnóstico.

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