Se llama Mirian. Tiene 28 años, nació en Lorca y es embrióloga. Aunque estos datos no ayudarían a seducir a un periodista para que la convirtiera en la protagonista de una de sus entrevistas, esconde una historia apasionante. El suyo es uno de esos testimonios que conmueven. Pero, sobre todo, que hacen reflexionar sobre los caprichos del destino, sobre ese poder inevitable e ineludible que, según se cree, guía la vida humana hacia una dirección concreta y que determina que “nada existe por azar” al igual que “nada se crea de la nada”.
Precisamente, la creación es el principio de la historia de Mirian. “A pesar de que mi madre tenía problemas de fertilidad con 25 años, en el camino se cruzó con dos profesionales que son Pedro Caballero, el fundador de Clínica Tambre, y Rocío Nuñez, que es la embrióloga que procesó las muestras en aquel entonces. Ellos les dieron la posibilidad a mis padres de abrir un camino de posibilidades para tener un hijo. Mis padres, sin dudarlo, cogieron la maleta y se vinieron para Madrid con la ilusión de tenernos. Y ¡ya podéis ver que lo consiguieron! Después de varios intentos, les dieron la gran noticia de que la beta era positiva”, narra Mirian Sánchez Tudela en este vídeo.
Volver a donde todo comenzó: Clínica Tambre
Conocer que había nacido gracias a la reproducción asistida fue “especial” para Mirian. Le hizo “sentir diferente”. ¿Empezó entonces a germinar en ella la semilla de la inquietud por dedicarse a la embriología? Mirian responde a esta pregunta en el vídeo y descubre esa “casualidad” que hace de su historia, un relato único.
Reconoce que las técnicas y tratamientos en reproducción asistida avanzan a pasos acelerados y, a día de hoy, “son prácticamente nulas las posibilidades de quedarse embarazada de más de un embrión”. Hoy en día, Mirian siente una gran pasión por la embriología: “La embriología para mí es crear vida y ayudar y contribuir a realizar los sueños de personas que han tenido problemas de fertilidad como los han tenido mis padres. Igual que en un momento dado se les ayudó a mis padres, yo siento que tengo que ayudar a esas personas”.